Nuevamente, Lourdes Ciccarone mostró una faceta que al público no le gusta en absoluto: tras escupir el vaso de Candela, ahora lo hizo con el plato del peruano.
Ezio fue víctima del robo de su camioneta en Avenida Peñaloza y Castelli. Su hija la buscó por toda Santa Fe hasta que la encontró en un descampado.